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Ciudad de México. Un juez de control vinculó a proceso a un sujeto por el delito de feminicidio agravado en contra de Graciela Cifuentes, profesora de la UNAM, y su hija Sol Cifuentes, estudiante de arquitectura, ocurrido el pasado 15 de marzo en el domicilio de ambas, ubicado en la colonia Santa Rosa Xochiac, delegación Álvaro Obregón.
El Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México informó que en continuación de audiencia, el impartidor de justicia fijó un periodo de seis meses para el cierre de la investigación complementaria, y mantuvo la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa en contra del imputado, que deberá cumplir en el Reclusorio Preventivo Varonil Sur.
Durante la audiencia inicial realizada el pasado miércoles, el ministerio público acusó al imputado de privar de la vida a las dos mujeres, para posteriormente incendiar el domicilio, a fin de borrar cualquier evidencia que lo relacionara con las víctimas, y darse a la fuga a bordo del vehículo propiedad de una de las víctimas.
La Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México señaló que el análisis genético realizado al probable responsable fue compatible con el de la profesora de 54 años, el cual fue realizado por personal especializado de servicios periciales y consistió en la recolección de indicios genéticos aplicados de acuerdo al protocolo de feminicidio.
En las huellas de lucha, defensa y forcejeo se registraron datos genéticos del agresor que resultaron coincidentes con los de Graciela Cifuentes, por lo que el dictamen se agregó a la carpeta de investigación, como uno de los elementos de prueba presentados ante el juez de control, para vincularlo a proceso.
Con base en las pruebas presentadas, por la dependencia, a través del ministerio público, el juez resolvió la situación jurídica del imputado en la duplicidad del término constitucional, luego de que su defensa lo solicitara.
El sujeto era la pareja sentimental de la joven y junto con su mamá las asesinó cuando Sol intentó terminar su relación e incendió la casa en reconstrucción, afectada por el sismo del 19 de septiembre, para después esconderse con familiares y trasladarse en Querétaro, siendo ubicado en Azcapotzalco.
La PGJCDMX señaló que de comprobarse su culpabilidad en el doble feminicidio podría cumplir una sentencia de hasta 120 años en prisión.
