WASHINGTON (apro).- Jeff Sessions, procurador general de Justicia del gobierno de Donald Trump, prometió que bajo su liderazgo las agencias federales estadunidenses acabarán con los cárteles del narcotráfico y darán cumplimiento a las nuevas directrices en materia de inmigración.
“Trabajaremos para acabar con los cárteles del tráfico de drogas y para desmantelar a las pandillas; aplicaremos el fortalecimiento a las leyes de inmigración y procesaremos judicialmente a quienes de manera repetida violen nuestras fronteras”, declaró Sessions durante la Reunión Anual de Invierno de Procuradores Generales de Justicia de Estados Unidos.
El nuevo fiscal y exsenador republicano por el estado de Alabama recordó a los procuradores generales de los 50 estados de la Unión Americana que la sociedad de su país sufre una “epidemia” de consumo de heroína.
Sessions explicó que entre 2010 y 2014 se triplicó el número de estadunidenses fallecidos por sobredosis de heroína, y responsabilizó de ello al narcotráfico mexicano.
“Al mismo tiempo –dijo–, el flujo de drogas cruza nuestra frontera sur y llega a ciudades y poblaciones llevando a ellas violencia, adicción y miseria”.
Sin mencionar la gran demanda y consumo de drogas por parte de los estadunidenses ante el fracaso de las políticas de prevención y salud pública del gobierno federal, Sessions insistió en responsabilizar de la crisis a los narcotraficantes mexicanos.
“En particular, hemos visto un incremento en el tráfico de una nueva heroína de bajo costo traficada por los cárteles de la droga de México que colaboran con los pandillas callejeras locales”, destacó.
Con la expansión del mercado de consumo de heroína mexicana, el exsenador por Alabama sostuvo que también se ha incrementado la criminalidad violenta en las calles de las ciudades y poblaciones estadunidenses por la lucha entre las pandillas para ganar territorios para la venta de estupefacientes.
Y de manera indirecta Sessions responsabilizó al gobierno del expresidente Barack Obama por la criminalidad relacionada con el tráfico de drogas en Estados Unidos. Apuntó que en años pasados el Departamento de Justicia dio prioridad al combate de personas que cometían delitos relacionados con la portación de armas, descuidando con ello el problema de la venta y trafico de drogas.
Asimismo, indicó que en 2015 el proceso de criminales relacionados con el tráfico de estupefacientes cayó 18%.
“Bajo mi liderazgo en el Departamento de Justicia parará esta tendencia. Nuestros agentes y fiscales darán prioridad a los casos contra los criminales más violentos, para poder removerlos de nuestras calles”, declaró el procurador general.
En términos de los nuevos lineamientos de la política migratoria, bajo la orden ejecutiva que el pasado 25 de enero firmó el presidente Donald Trump, el procurador añadió que el Departamento de Justicia hará lo que sea necesario para cumplir la parte que le corresponde en la ubicación, detención, deportación y proceso de criminales e inmigrantes indocumentados.
Las nuevas directrices del gobierno de Trump en política migratoria piden al Departamento de Justicia imputar cargos criminales a inmigrantes indocumentados o residentes legales que vivan en Estados Unidos, y que se descubra que en algún momento pagaron a un coyote para meter al país a menores de edad.
De igual manera, exigen la ubicación y remoción inmediata de Estados Unidos de extranjeros con antecedentes penales, inmigrantes indocumentados o residentes legales acusados de delitos graves.