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Todas la religiones regulan cuestiones relacionadas con el cuerpo y la salud de los creyentes. Los Testigos de Jehová, por ejemplo, prohíben las transfusiones de sangre; la Cienciología está en contra de los tratamientos de siquiatras y sicólogos. La Iglesia católica ha manifestado oposición a los derechos sexuales y reproductivos, como el aborto, expuso Felipe Gaytán, investigador de la Universidad La Salle.
También estas normas sobre el cuerpo se presentan en creencias de pueblos que pueden estar en favor o en contra de una muerte digna, o en la conformación de grupos como los antivacunas, éstos últimos con auge en Europa.
Elogian fallo de la Corte
Sobre la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la cual determinó en días recientes que las autoridades sanitarias podrán ir contra la autonomía de los padres para decidir sobre la salud de sus hijos cuando se impida, por creencias religiosas, la aplicación de un tratamiento para salvarle la vida, Felipe Gaytán señaló que es un precedente para los derechos humanos. No puede haber ninguna creencia religiosa por encima de los derechos de las personas a la vida, dijo en entrevista.
Alejandra Aguilar, investigadora del Centro de Investigación y Estudios Superiores en Antropología Social unidad Occidente, dijo que el fallo de la SCJN abre un debate. Dijo que en estos casos también se debe advertir la injerencia del Estado en los cuerpos de las personas. Para un creyente es la voluntad de Dios, otros no podemos entender que sea decisión de los padres y que la medicina puede hacer algo.
Alejandra Aguilar dijo que son dos choques de creencias, la científica, que es también un modelo de la realidad, y la religiosa. Señaló que este debate debería ser público. El lugar que ocupan las expresiones religiosas en el país también juegan un papel importante, pues mientras no se percibe como normal las costumbres de los Testigos de Jehová, sí lo que marca la Iglesia católica, como el no al aborto.
Según el censo más reciente sobre preferencias religiosas, 82.7 por ciento son católicos; 5 por ciento, evangélicos; 4.7 por ciento no tiene religión; 1.6 por ciento, pentecostales y neopentecostales; 1.4 por ciento, Testigos de Jehová; 0.7 por ciento, protestantes históricos; 0.6 por ciento, adventistas, 0.3 por ciento, mormones, entre otros.
