jornada.com.mx
Ciudad de México. La austeridad y las rifas llegaron al Partido Revolucionario Institucional (PRI) para afrontar la reducción de recursos y el pago de una deuda bancaria cercana a los 300 millones de pesos .
Durante la 64 sesión ordinaria del Consejo Político Nacional (CPN), a la cual sólo asistió uno de los 12 gobernadores emanados del tricolor, la Comisión de presupuesto informó que para este año, el partido tendrá 42.2 por ciento menos de recursos que en 2018.
Si bien en ese año hubo elección federal, el partido inició el nuevo periodo (2019) con déficit y contrajo una deuda bancaria de 286.4 millones de pesos, como fuente de financiamiento.
Otra de las propuestas avaladas por los consejeros fue explorar la posibilidad de “domiciliar” el pago de cuotas partidistas – para asegurar su cumplimiento de los militantes-, así como volver a la organización de espectáculos y eventos deportivos.
En este contexto, las porras y la batucada de algunos contingentes llevados al auditorio Plutarco Elías Calles contrastaron con los rostros serios de los integrantes del presídium.
En las primeras filas estaban algunos de los expresidentes del PRI , los que nunca faltan : Dulce María Sauri, Cesar Camacho, José Antonio González y Beatriz Paredes.
El gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, se sentó en las butacas principales porque habría estado en solitario en el ala derecha del templete , asignada a los mandatarios estatales en todas las sesiones del Consejo. Hoy sólo asistió un gobernador.
Sin discusión alguna, los consejeros avalaron la estrategia de no contraer nueva deuda durante el año en curso, en el que dispondrán de una bolsa presupuestal de 861.1 millones de pesos.
“El PRI se debe a pegar a la nueva realidad”, les advirtió Fernando Galindo, presidente de la Comisión de presupuesto del CPN, quien presentó un informe pormenorizado del alud de compromisos asi como del gasto diario del priismo para los meses venideros.
Cargando ...
