Por José Luis Preciado Trujillo
NoticiasPV.Com
Denuncian que los amantes de lo ajeno se están robando las bicicletas de Valle Dorado y Jarretaderas, y nadie hace nada por evitar estos atracos que ocurren a plena luz del día.
Se dio a conocer por parte de Las personas afectadas, que los ladrones se la pasan acechando a quienes dejan amarradas con cadenas sus bicicletas en los cruceros del fraccionamiento Valle Dorado y Jarretaderas, en donde al parecer ya les tienen marcado el tiempo de cuando las dejan sus dueños, para irse a trabajar y saben a la hora que regresan por ellas.
Comentan algunos afectados que los delincuentes ya los tienen identificados, pero algunos no denuncian los hechos por temor a represalias, ya que son sujetos conocidos que se la pasan drogándose y sin hacer nada todo el día en los puentes peatonales de Valle Dorado, y en Jarretaderas, a los que la policía ni siquiera voltean a verlos.
En Jarretaderas, comentan que ya tienen plenamente identificado a un sujeto de nombre Gonzalo, a quien ubican que se la lleva por la calle donde está el depósito de un tal “Ñoño”, por lo que piden a las autoridades policiacas que acudan a detenerlo para que responda por los robos de las bicicletas que han desaparecido en el poblado, argumentando que ya son varias que se ha robado este conocido malandrín.
En Valle Dorado, comentan que también tienen identificados a los ladrones de bicicletas, y a algunos hasta han sido grabados en cámaras de video, pero que ni así intervienen las autoridades policiacas, es por eso que ya se están organizando los vecinos para implementar un operativo de vigilancia y tratar de capturar ellos mismos a los rateros, que ya los tienen hartos por tanta robadera, pues comentan que además de las bicicletas, también se meten a saquear los domicilios.
Piden la intervención de la Policía para que se vayan a realizar rondines de vigilancia, a ver si así aminora un poco el índice de robos en estos lugares, ya que de no ser así, pues ellos se coordinaran para hacer grupos de vigilantes y tomaran la justicia por sus propias manos, pues temen que los hampones les vayan a hacer daños a sus familias, ya que siempre andan bajo los efectos de sustancias prohibidas y son capaz de lesionar o asesinar con tal de sacar para seguir drogándose.
Urge la inmediata intervención de las autoridades policiacas en estos lugares, antes de que pueda ocurrir una desgracia que después tengan que lamentar.
