Iván Reyes Arzate, conocido como “La Reina”, aprovechó su posición en la Policía Federal para filtrar información al narcotráfico
infobae.com
Desde que se anticipó que en la lista de testigos en el juicio contra Genaro García Luna habría narcotraficantes condenados y exfuncionarios se planteó la posibilidad de que uno de los contemplados fuera Iván Reyes Arzate, alias “La Reina”.
Este individuo es un exagente de la Policía Federal que, durante el sexenio de Felipe Calderón, estuvo al frente de la Unidad de Investigaciones Sensibles (UIS), en donde aprovechó su acceso a información clasificada para venderla al narcotráfico.
En 2017, Reyes Arzate decidió entregarse en Estados Unidos debido a los cargos que le habían sido imputados por el gobierno de dicho país.
Durante el juicio que enfrentó “La Reina” en ese mismo año, la Fiscalía presentó como evidencias en su contra una serie de conversaciones que el exjefe de la UIS tuvo con un operador del cártel conocido como Seguimiento 39, una organización que trasladaba cocaína desde Centroamérica hasta Texas y California, pasando por México, en colaboración con los cárteles de Sinaloa, los Beltrán Leyva, Jalisco Nueva Generación, del Golfo y Los Zetas.
Infobae México tuvo acceso a los documentos oficiales que revelaron cómo Iván Reyes Arzate le advirtió a un traficante del cártel encabezado por Ángel Domínguez Ramírez Jr. que estaba siendo investigado y perseguido por el gobierno.
La información fue expuesta el 10 de febrero de 2017 durante el testimonio de John R. Gildein, un agente especial de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) que participó en el juicio contra “La Reina”.
De acuerdo con la información asentada en el archivo de la Corte de Distrito de los Estados Unidos para la División Este del Distrito Norte de Illinois, en Chicago, el criminal a quien “La Reina” alertó sobre las investigaciones antidrogas pudo haber sido Gerónimo Gámez García, apodado como “El Jero” o “El Primo” (por su parentesco con Arturo Beltrán Leyva, “El Barbas”).
En el apartado titulado “Descubrimiento de filtración dentro de la policía mexicana a Gámez” se especificó que el 9 de septiembre de 2016, aproximadamente a las 16:42 horas, Iván Reyes Arzate utilizó el pseudónimo “Ayala” para advertirle a Gámez (G) que estaba siendo buscado por la Fiscalía estadounidense:
“Ayala”: Respecto al asunto de ayer, adivina qué. Tú eres el objetivo de la investigación de Estados Unidos.
G: ¿Cuáles dispositivos son? ¿Me deshago de ellos?
“Ayala”: Han estado interceptando las comunicaciones … Deshazte de todos [los dispositivos]
En este punto de la conversación, “La Reina” envió una foto con el texto: “Eres tú. Es una mala foto porque fue tomada desde una computadora [por un agente de la UIS de la Policía Federal durante los operativos de vigilancia. La imagen fue capturada en abril de 2016 en Cancún, México]”.
G: ¿Lleva ya un tiempo?
“Ayala”: Sí, se supone que desde abril.
G: Mmmm, no sé, no puedo identificar a los otros dos.
“Ayala”: Ellos saben que estás aquí [en la Ciudad de México] y quieren ver con quiénes te reúnes. No hables [por teléfono].
G: No hablo con nadie.
“Ayala” : Sólo por mensajes [debido a que Reyes creía que dichas comunicaciones no podían ser interceptadas].
G: Ok, me desharé de ellos y conseguiré unos nuevos.
En los mensajes posteriores, Gámez le pidió a “La Reina” que se reunieran para discutir la situación a detalle y saber de qué manera proceder.
Un día antes de la conversación que Reyes Arzate sostuvo con “El Primo” mediante un dispositivo BlackBerry, el exjefe policiaco fue contactado por un agente de la DEA, quien le compartió algunos hallazgos de la investigación.
Se mencionó, por ejemplo, que los sujetos que tenían en la mira se reunirían, por la tarde del 8 de septiembre, en un restaurante de la Ciudad de México. Asimismo, reveló que ya tenían ubicado el domicilio en donde vivían Gerónimo Gámez y otro sujeto: el departamento 901 del complejo ubicado en la calle Lago Neuchatel No. 12, colonia Granada, en la actual alcaldía Miguel Hidalgo.
El 12 de septiembre de 2016, luego de haber recabado información respecto a las indagatorias del gobierno estadounidense, Reyes Arzate volvió a conversar con “El Primo”.
Según los mensajes, otro integrante de la UIS, cuya identidad se mantuvo reservada, le notificó a Reyes Arzate que toda la información relacionada con la investigación contra “El Primo” había sido proporcionada por una fuente confidencial que se había mantenido cercana al traficante.
“No digas nada […] El informante estaba sentado contigo el día de la foto [de abril de 2016]. Ten cuidado”, le dijo “La Reina” al primo de Arturo Beltrán Leyva.
Los documentos del juicio contra Iván Reyes Arzate no especificaron qué ocurrió posteriormente con dicha fuente confidencial, pero esa no era la primera vez que el exjefe de la UIS le brindaba este tipo de información a grupos criminales.
En 2009, Arturo Beltrán Leyva convocó una reunión con otros miembros del cártel, incluidos los hermanos Alberto y Mario Pineda Villa, debido a múltiples decomisos de cocaína que había sufrido su organización.
Durante dicho encuentro le mostraron al “Barbas” la fotografía de un informante infiltrado de la DEA, a quien señalaron como responsable de las incautaciones.
“Reyes [Arzate] les explicó que el infiltrado había sido arrestado en Miami y comenzó a colaborar con la DEA de inmediato con información para interceptar los cargamentos de droga de los Beltrán Leyva provenientes desde Colombia”, narró en su testimonio el agente Gildein.
Luego de que “La Reina” brindara esos detalles, Arturo Beltrán Leyva le ordenó a Mario Pineda Villa, alias “El MP”, que secuestrara, torturara y asesinara al agente infiltrado. Reyes Arzate y otros dos funcionarios de la Policía Federal recibieron un pago de tres millones de dólares a cambio de dicha información.
Hasta el momento se desconoce si “La Reina” acudirá a la Corte de Brooklyn para testificar en contra de García Luna, pero su participación podría ser clave para apuntalar los vínculos entre el exsecretario de Seguridad Pública y los grupos del narcotráfico.