A pesar de que continúan los trabajos de rehablitación
Aunque siguen lentos los trabajos para rehabilitar la calle San Salvador en la colonia 5 de Diciembre, persisten los riesgos de que ocurran percances en perjuicio de los ciudadanos.
Algunos confían dicha obra terminará en tiempo y en forma, otros son menos optimistas.
En la colonia 5 de diciembre en Puerto Vallarta, los ciudadanos están cada vez más inquietos debido a la prolongada tardanza en los trabajos de rehabilitación de la calle San Salvador.
Desde que comenzaron las obras, los residentes han sido testigos de un avance lento y poco consistente, lo que ha llevado a un aumento en la frustración y preocupación entre los vecinos.
La falta de progreso visible en el proyecto ha generado dudas sobre su culminación a tiempo, lo que ha impactado negativamente en la vida diaria de la comunidad.
Los residentes de la colonia han expresado su alarma por los riesgos asociados con el estado actual de la calle San Salvador. Los trabajos incompletos y las áreas desiguales han creado un entorno peligroso tanto para peatones como para conductores.
Los baches y las secciones sin señalización adecuada han contribuido a una mayor probabilidad de accidentes, aumentando el riesgo de lesiones para quienes transitan por la zona. La falta de medidas de seguridad y de señalización apropiada ha generado un clima de incertidumbre y temor entre los habitantes.
Además de los riesgos físicos, la tardanza en la rehabilitación ha generado inconvenientes cotidianos para los ciudadanos.
Las calles bloqueadas y el tráfico desviado han afectado el acceso a las viviendas y negocios locales, lo que ha impactado la economía de la zona. Los residentes han tenido que lidiar con rutas alternativas complicadas y tiempos de desplazamiento extendidos, lo que ha añadido una capa de dificultad a su vida diaria y ha exacerbado la insatisfacción general.
En respuesta a la creciente inquietud, algunos vecinos han comenzado a organizarse para buscar respuestas y exigir una mayor transparencia en el avance de los trabajos.
Han solicitado reuniones con las autoridades locales y han creado peticiones para acelerar la rehabilitación de la calle.
A medida que la comunidad se une en su demanda de soluciones, la presión sobre los responsables del proyecto aumenta, con la esperanza de que se tomen medidas inmediatas para resolver la situación y garantizar la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos afectados.