Anhelo de muchos, promesas de gobiernos
El cableado oculto en colonias de Puerto Vallarta, principalmente en la zona céntrica es hoy un sueño guajiro, producto de diversas promesas de anteriores administraciones municipales.
Hoy en día, el cableado en las alturas es un pésimo espectáculo para los residentes y los visitantes nacionales e internacionales, pero no hay más, dicen algunas familias de la colonia 5 de diciembre.
En Puerto Vallarta, el sueño de contar con un cableado oculto en las colonias sigue siendo una aspiración recurrente tanto para autoridades como para los habitantes de diversas zonas de la ciudad.
A pesar de los avances en infraestructura urbana, muchas colonias todavía cuentan con cables aéreos que, además de ser un desafío estético, representan riesgos tanto para la seguridad como para el tráfico vehicular y peatonal.
La idea de instalar cableado subterráneo ha sido planteada en varias ocasiones, buscando mejorar la imagen urbana y reducir los problemas derivados de tormentas, vientos fuertes o accidentes que puedan afectar las líneas eléctricas y de telecomunicaciones.
Sin embargo, aunque este proyecto de modernización es visto como una solución ideal para muchas colonias vallartenses, las dificultades económicas y logísticas han limitado su implementación.
Las autoridades locales han señalado que, aunque el cableado oculto representa una mejora en la calidad de vida y la seguridad de los ciudadanos, su costo elevado y la complejidad de llevarlo a cabo en áreas ya urbanizadas dificultan su pronta ejecución.
No obstante, los «sueños guajiros» de los vallartenses continúan vivos, con la esperanza de que, con el tiempo, se pueda llevar a cabo un plan integral que logre transformar la ciudad y garantizar un entorno más seguro y visualmente atractivo para todos.
