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Las agresiones y homicidios contra políticos no se detuvieron tras la elección del 1 de julio, la más violenta en la historia. Y es que desde el 2 de julio van 63 ataques y 21 homicidios de políticos, cuatro de ellos autoridades ya electas.
Dos de los ejecutados eran emanados de Morena, uno del PRD y otro del PVEM. Se trata de: Eliseo Delgado Sánchez, alcalde electo en Buenavista Tomatlán, Michoacán; Rosalío González Cortez, regidor electo en Armería, Colima; Agustín Banda Olivares, regidor electo en Cortázar, Guanajuato; y Félix Aguilar Caballero, alcalde electo en Nopalucan, Puebla, respectivamente.
A estos casos se suma el atentado contra Blas Godínez Ortega, presidente municipal electo de Gómez Farías, Chihuahua, quien fue postulado por Morena. Godínez Ortega se debate entre la vida y la muerte.
Las autoridades electas también han sufrió otro tipo de agresiones como ocurrió con Roberto Gustavo González Hinojosa, alcalde electo de Ciudad Mier, Tamaulipas, quien fue “levantado” y privado de la libertad por 12 horas.
Pedro Carrizales, ‘El Mijis’, diputado electo en San Luis Potosí, denunció redes sociales que este fin de semana fue víctima de un atentado. “Hace un par de horas sufrí un atentado, iba circulando cuando un automóvil se me empareja y los ocupantes me empiezan a gritar palabras altisonantes’’, narró.
Según el Indicador de Violencia Política de Etellekt, en el último año (entre el 1 de septiembre de 2017 y el 31 de agosto de 2018), han ocurrido en todo el país unas 850 agresiones y 175 asesinatos contra políticos.
De ese total, el 81 por ciento han sido contra opositores a los partidos gobernantes en las 32 entidades del país. “Lo anterior significa que la violencia política transita por una ruta distinta al actual clima de inseguridad y homicidios por rivalidad delincuencial”, aseguró la consultora Etellekt.
De acuerdo con el análisis de la firma, los altos niveles de violencia política han persistido de igual forma en el actual periodo de transición, posterior a los comicios del pasado 1 de julio.
En tanto, un recuento hecho por El Financiero y datos de Etellekt, advierte que durante las campañas electorales hubo 134 políticos asesinados, 48 de ellos eran precandidatos o candidatos a un puesto de elección popular, es decir, un promedio de 13 asesinatos de políticos por mes.
Incluso, horas antes de la elección hubo cinco hechos de violencia, entre ellos los homicidios de Emigdio López, aspirante a diputado local en Oaxaca por Morena, y Javier Ureña, alcalde de Buenavista Tomatlán, Michoacán.
El 26 de junio de 2018, en Oaxaca, un grupo armado atacó con armas de fuego a Raymundo Carmona Laredo, candidato de la alianza ‘Por México al Frente’ a la presidencia municipal de San Pedro Pochutla.
Ese mismo día también atentaron contra el presidente municipal de Eduardo Neri, Guerrero, Pablo Higuera Fuentes. Ese funcionario es esposo de Natividad López González, candidata del PRD a la alcaldía del citado municipio.
El PRI es el partido que más baja de precandidatos o candidatos tiene, con 12; le sigue el PRD, con 10 y Morena, con siete. Los estados de Guerrero, Michoacán y Oaxaca, son los que presentan una mayor incidencia de homicidios.
También tienen alta incidencia de agresiones contra políticos los estados de Puebla, Veracruz, Estado de México, Chihuahua, Jalisco, Guanajuato, Chiapas, Baja California e Hidalgo.
De todos los casos, en pocos hay personas detenidas como responsables.
