La tarde de ayer, en el río Pitillal, cerca del puente colgante de la colonia Playa Grande, fue localizado un hombre con serias heridas sufridas, presuntamente por tortura.
El sujeto dijo ser vecino de la colonia El Progreso y entre las heridas más graves que presentaba, era que tenía un desarmador enterrado en la mano y ambas piernas fracturadas.
Dicho hombre que fue identificado como Gerardo “NN” de 22 años de edad, no quiso decir qué fue lo que le pasó, solo dijo que sujetos desconocidos lo habían golpeado y luego lo habían tirado en ese lugar, en donde ya tenía poco más de dos horas pidiendo ayuda.
Una familia que se divertía en el río escuchó los gritos de auxilio de la persona y tras caminar entre las piedras y el agua, lo encontraron atorado entre la maleza y unas rocas.
Al ver que tenía un desarmador enterrado en la mano izquierda y no se podía moverse debido a posibles fracturas que tenía en ambas piernas, la familia de inmediato dio aviso a las autoridades.
El reporte llegó a los números de emergencia al filo de las 15:10 horas y tras ello de inmediato al lugar acudieron elementos de la Policía Municipal y Paramédicos de Bomberos para ayudar al herido, informando tiempo después que el mismo presentaba posibles fracturas en ambas piernas, golpes en todo el cuerpo, una herida punzo cortante en la espalda baja del lado izquierdo y asombrosamente tenía un desarmador enterrado en la mano izquierda.
Policías cuestionaron a la persona sobre lo que había ocurrido y este dijo únicamente, que sujetos desconocidos lo habían golpeado y luego lo habían tirado ahí, en donde tenía casi dos horas pidiendo auxilio y nadie lo ayudaba, hasta que la familia lo escuchó y se acercó a prestarle auxilio.
La persona fue llevada al hospital Regional, en donde fue recibido por los médicos de guardia y a donde acudieron tiempo después elementos policiales para verificar si requería presentar denuncia por las lesiones que tenía.
