Actualidad.rt.com/ Una reunión familiar para despedir 2016 celebrada en Campinas (Sao Paulo, Brasil) terminó de manera trágica cuando Sidnei Ramis de Araujo se presentó en el lugar, abrió fuego y mató a 12 personas, hirió a otras tres y se suicidó, informa el portal Globo.com.
Para perpetrar sus crímenes, ese hombre iba armado con una pistola de calibre 9 mm, dos cargadores, municiones, un cuchillo y otros objetos aparentemente explosivos. El atacante acabó con la vida de su exesposa, el hijo de ocho años que tenían en común y varios de sus familiares.
La Policía calificó el caso como homicidio seguido de suicidio. El agresor estaba en el proceso de separación de su mujer y, según un testigo, la agresión que desembocó en la tragedia se debió a que su antigua pareja se quedó con la custodia del menor. Por su parte, las tres víctimas que sobrevivieron al ataque permanecen hospitalizadas.