Por Mauricio Lira Camacho
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Se va desarmando.
Gritó un empleado de la fiscalía regional de justicia en esta zona, cuando vio pasar esta unidad del municipio.
Frente a las instalaciones de la Fiscalía existe una glorieta, ahí dio vuelta la camioneta con el número económico 122.
Esta, iba conducida por un joven de no más de 25 años de edad, complexión delgada acompañado de otro de mayor peso y tez morena.
Ambos encargados de la recoelcción de la basura en esta zona, muy cerca de la central camionera.
En el trayecto hacia las esquinas de las calles en la colonia de turno, desde la avenida México la camioneta era fácilmente visible por todos, debido a la gran cantidda de humo que dejaba a su paso.
Lo más emblemático fue cuando estudo dando vuelta en la Fiscalía.
Varios empleados iban saliendo y uno gritó «se va a desarmar».
Minutos después, este vehículo se detuvo en una tienda de abarrotes, los dos empleados hicieron sus compras y siguieron su camino de recolectar basura.
Es contradictorio que unidades de aseo y limpia, estén en esas paupérrimas condiciones, dejando mucho que desear ante la vista de los ciudadanos.
Así muchos vehículos oficiales de diversas dependnecias municipales, funcionan a duras penas, se encuentran en mal estado o de otras que se localizan en el taller municipal.
Pero, son básicamente las unidades pertenecientes a las áreas de aseo público y servicios públicos municipales, las que tienen el parque vehicular más dañado de la administración.
Por doquier se obsrervan este tipo de unidades contaminantes, algunos con las defensas traseras amarradas con alambre, espejos retrovisores rotos, llantas con mas de medio uso de vida, autos golpeados, despintados que verdaderamente dan pena.
Esta unidad la 122 en pésimas condiciones aventando humo y contaminando, siendo una camioneta del servicio de limpia.
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