Por Mauricio Lira Camacho
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Desde el primer segundo de este día 10 de mayo, conmemorando a las madres, ya había en Puerto Vallarta en casi cada esquina un puesto o vendedor de flores en cada crucero.
Este año aumentó el padrón de las personas que tradicionalmente obtienen un permiso provisional para desarrollar dicha actividad.
Sin embargo, llamó la atención de muchos que, por ejemplo, en la avenida Prisciliano Sánchez desde la 1 de la mañana ya hubiera instalados en puntos estratégicos una serie de módulos y puestos de venta de flores y regalos para las madres.
Todos reunían el mismo patrón de venta en cuánto al diseño de los puestos y arreglos, los cuales tenían unos precios elevados que oscilaban entre los 200 y los 250 pesos los más baratos.
Siendo los de mayor demanda los ramos de rosas y muñecos de peluche, principalmente.
Puestos que se ubicaban en el centro de Puerto Vallarta, centro de la delegación de El Pitillal, a lo largo de la carretera Las Juntas Ixtapa, lo mismo que en la avenida Prisciliano Sánchez y el corredor de las instalaciones de la central camionera.
Desde muy temprano se observó además a una cantidad variada de diversos vendedores que ya ofertaban a los transeúntes y automovilistas los productos antes mencionados.
Todos los cruceros estuvieron inundados de puestos con variados productos, empero este año se observaron más de los habituales que en otros años.
Se desconoce al cierre de la información cuántos permisos de esta naturaleza autorizó la jefatura de reglamentos municipales y si en verdad hicieron operativos para inspeccionar el buen desempeño de la actividad.
Además, si por su parte inspectores de la procuraduria federal del consumidor, PROFECO, hicieron sus recorridos de vigilancia para impedir los productos fueran vendidos más allá de los precios permitidos.
